domingo, 13 de febrero de 2011
viernes, 26 de marzo de 2010
308
Rodé por escaleras interminables,
bañado en distintos tonos de burdeo,
para encontrarme con puertas
que nunca jamás se abrirían.
Puertas fabricadas por albañiles malintencionados,
que simplemente disfrutan
decir
No.
Mientras la policía echa raíces en las plazas,
siempre ai unos que no saben los que pasa,
por no querer saber, o por saber una mentira.
Algunos otros saben, y a las calles ya no salen ,
se encierran en sus piezas y se cuelgan de las cortinas
tocando guitarras de 3 cuerdas,
o llenando papeles con acuarela
hidratada en lagrimas.
bañado en distintos tonos de burdeo,
para encontrarme con puertas
que nunca jamás se abrirían.
Puertas fabricadas por albañiles malintencionados,
que simplemente disfrutan
decir
No.
Mientras la policía echa raíces en las plazas,
siempre ai unos que no saben los que pasa,
por no querer saber, o por saber una mentira.
Algunos otros saben, y a las calles ya no salen ,
se encierran en sus piezas y se cuelgan de las cortinas
tocando guitarras de 3 cuerdas,
o llenando papeles con acuarela
hidratada en lagrimas.
martes, 9 de febrero de 2010
sábado, 23 de enero de 2010
miércoles, 20 de enero de 2010
lunes, 18 de enero de 2010
Escrito en hospital
Me acerco entre dolores y quejidos a la ventana
saco mi mano,
el viento pasa, y no se queda con mis solitarios dedos.
miro hacia abajo
veo cabezas diminutas, con cuerpos diminutos, acarreando bolsas diminutas.
Salen y entran al templo del consumismo,
se agrupan y esperan su turno, para comulgar las hostias hechas de carne frita.
lloro de pena y de asco.
Pienso
"He soportado el dolor y he soportado el encierro,
podría sacar la mano por la ventana y soportar no sentir
ni viento, ni lluvia, ni frió, ni calor...Pero me cuesta tanto
soportar el horror de ver tantas cabezas vacías en tantos cuerpos vacíos
salir con tantas bolsas vacías, sintiéndose plenas."
saco mi mano,
el viento pasa, y no se queda con mis solitarios dedos.
miro hacia abajo
veo cabezas diminutas, con cuerpos diminutos, acarreando bolsas diminutas.
Salen y entran al templo del consumismo,
se agrupan y esperan su turno, para comulgar las hostias hechas de carne frita.
lloro de pena y de asco.
Pienso
"He soportado el dolor y he soportado el encierro,
podría sacar la mano por la ventana y soportar no sentir
ni viento, ni lluvia, ni frió, ni calor...Pero me cuesta tanto
soportar el horror de ver tantas cabezas vacías en tantos cuerpos vacíos
salir con tantas bolsas vacías, sintiéndose plenas."
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